Martes 20 de Diciembre de 2005
Comunidado de Prensa de AFRICA TRADE NETWORK
Resultados para África: Cualquier cosa menos desarrollo
En lugar de convertirse en un importante acontecimiento hacia el logro de la tan mentada ronda de desarrollo, Hong Kong ha culminado como una plataforma para resultados contrarios al desarrollo.
La declaración de la reunión Ministerial de la OMC en Hong Kong representa una pérdida para los países africanos. Estos se han visto obligados a ceder en la mayor parte de las posiciones con las que llegaron a Hong Kong. Y cualquier tipo de consuelo que exista en otras áreas resulta como máximo ambiguo y como mínimo ilusorio.
La pérdida más evidente se registra en el área de servicios, donde el derecho a elegir qué sectores liberalizar y en qué medida, de acuerdo con las propias necesidades del país, ha sido socavado. El Anexo C sobre servicios se abre a las negociaciones plurilaterales y sectoriales así como a una mayor apropiación extranjera en materia de inversión en los sectores de servicios – ejerciendo enormes presiones sobre los países africanos para lograr la apertura de sectores de servicios sensibles a las poderosas compañías del Norte.
A través de la adopción de una fórmula suiza sobre el acceso al mercado para productos no agrícolas (NAMA), los países africanos se verán obligados a someter sus aranceles industriales a reducciones drásticas. Esto derivará en un mayor colapso de las industrias locales, desindustrialización y pérdida masiva de puestos de trabajo. El texto también se abre a la eliminación sectorial de aranceles industriales.
En el área de la agricultura, los intereses africanos más cruciales han sido dejados a un lado, como por ejemplo la necesidad de flexibilidades concretas para los países en desarrollo con techos arancelarios y bajos niveles de consolidación arancelaria.
La fecha límite del 2013 para la eliminación de subsidios a la exportación pierde significado cuando se compara con los daños que las medidas de apoyo interno de los países ricos han provocado sobre los agricultores africanos. El apoyo interno otorgado dentro de la UE asciende a 55.000 millones de euros, mientras que los subsidios a la exportación ascienden a 3.000 millones de euros.
Los países ricos también se han asegurado una vía de escape a través de la formulación de que la fecha límite habrá de confirmarse únicamente una vez que se hayan completado las modalidades.
Y todo esto a cambio del denominado paquete del desarrollo que está esencialmente vacío. La oferta realizada a los Países Menos Desarrollados se encuentra muy por debajo de las expectativas. En lugar de la demanda inicial de un derecho consolidado y acceso libre de cuotas a los mercados de los países desarrollados sobre todos los productos y para todos los Países Menos Desarrollados, han visto suavizar esta oferta a una cobertura de productos del 97%, con la mejor expresión del esfuerzo consignada en la frase “de manera constante”. Esto significa que los países ricos pueden exonerar exactamente aquellos productos que son de interés en materia de exportación para los Países Menos Desarrollados de África.
La asistencia al comercio es básicamente una propuesta vacía en el mejor de los casos, dado que no existe ningún compromiso para otorgar los recursos prometidos; y en el peor de los casos, representa una ayuda a la liberalización comercial para apoyar el ajuste de las economías africanas a la liberalización forzada.
En lo que refiere al algodón, la principal amenaza para los algodoneros africanos – el apoyo interno de los países industrializados que destruye el mercado para millones de algodoneros africanos – no ha sido eliminada.
Africa Trade Network
Contacto: Tetteh Hormeku, TWN-Africa, 92742581,
Karin Gregow, EcoNews Africa, 65360574
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