Lunes 15 de Agosto de 2005
Nuevas resoluciones de la Subcomisión de Derechos Humanos de la ONU
por Kanaga Raja
La Subcomisión de Promoción y Protección de los Derechos Humanos, de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), adoptó esta semana una serie de resoluciones sobre derechos económicos, sociales y culturales; violaciones a los derechos humanos y libertades fundamentales, y administración de justicia.
La Subcomisión, que celebra su 57º período de sesiones entre el 25 de julio y el 12 de agosto, es un órgano subsidiario de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y está integrada por 26 expertos independientes en derechos humanos, que actúan en calidad personal.
Con respecto a la violación de derechos humanos en todos los países, la Subcomisión adoptó una resolución sobre la prohibición absoluta de la tortura y otros tratos o castigos crueles, inhumanos o degradantes, deplorando los actos de tortura o maltrato que involucren la complicidad de personal médico, y recomendó que el secretario general de la ONU difundiera ampliamente los Principios de Ética Médica adoptados por la Asamblea General.
También urgió a todos los países a ratificar, lo antes posible, la Convención contra la Tortura y otros Tratos o Castigos Crueles, Inhumanos o Degradantes, así como su Protocolo Opcional, que fue puesto a la firma el 4 de febrero de 2003.
Sobre las operaciones militares dirigidas contra instalaciones médicas, medios de transporte y personal que merezca protección en conflictos armados, la Subcomisión expresó preocupación.
Asimismo, adoptó una resolución sobre ataques a personas que deben ser protegidas por su carácter de civiles, destacando que ningún motivo político, filosófico, religioso ni militar justifica esos ataques.
La transferencia de personas a un país donde enfrenten el riesgo real de ser sometidas a torturas, tratos crueles, inhumanos o degradantes, o ejecuciones extrajudiciales, sería una violación al derecho consuetudinario internacional, advirtió la Subcomisión.
En cuanto a la administración de justicia, el Estado de derecho y la democracia, el órgano adoptó una decisión en la que solicitó al presidente del 57º período de sesiones, Vladimir Kartashkin, que prepare un documento de trabajo sobre derechos humanos y soberanía nacional.
Entre otros asuntos, el documento debe referirse a la noción de soberanía, no sólo como un derecho de los países, sino también como responsabilidad; a los motivos para restringir la soberanía de un estado y el alcance de la obligación de los gobiernos de respetar los derechos humanos y las libertades fundamentales; la soberanía estatal y las leyes internacionales sobre derechos humanos, y la soberanía estatal y la violación criminal de derechos humanos.
La Subcomisión decidió también solicitar a los expertos Françoise Anne Hampson y Mohamed Habib Cherif que preparasen un documento de trabajo ampliado sobre la aplicación práctica del derecho a un recurso legal eficaz en caso de violación de los derechos humanos.
Además, adoptó resoluciones sobre la dificultad de establecer responsabilidades o culpas en materia de violencia sexual; la aplicación universal de tratados internacionales sobre derechos humanos, y la discriminación en el sistema de justicia penal.
Con respecto a los derechos económicos, sociales y culturales, la Subcomisión aprobó resoluciones sobre los efectos de los métodos y actividades de trabajo de las empresas multinacionales en el goce de los derechos humanos, y sobre la no discriminación consagrada en el párrafo segundo del Artículo 2 del Convenio Internacional sobre Derechos Económicos, Sociales y Culturales.
En la resolución sobre los métodos de trabajo y actividades de las empresas multinacionales, la Subcomisión agradeció a la presidenta de la séptima sesión del Grupo de Trabajo sobre ese asunto, Halima Embarek Warzazi.
En vista de las discusiones que tendrán lugar en la primera reunión del Grupo de Trabajo durante el 58º período de sesiones de la Subcomisión, ésta decidió invitar a participantes del Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial, la Organización Mundial del Comercio, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo, el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo, la Organización Internacional del Trabajo, el Instituto de Investigaciones de las Naciones Unidas para el Desarrollo Social y otras agencias pertinentes, y solicitó al Grupo de Trabajo que presente su informe sobre su octava sesión a la Subcomisión, en el próximo período de sesiones.
En relación con el Foro Social, la Subcomisión destacó la importante contribución realizada al debate por individuos que vivieron la extrema pobreza e individuos que viven y trabajan junto a ellos cada día, y solicitó al secretario general que adopte las medidas adecuadas para difundir información sobre el Foro.
Asimismo, destacó que el actual proceso de reforma de la ONU debe tomar en cuenta el aporte del Foro Social, y reafirmó su decisión de que el Foro se reúna todos los años.
En una resolución sobre la aplicación de las actuales normas sobre derechos humanos en el marco de la lucha contra la extrema pobreza, la Subcomisión solicitó al grupo ad hoc de expertos que prepare un informe final con una evaluación de las actividades realizadas, para presentar en el 58º período de sesiones.
También pidió al grupo ad hoc que continúe las consultas con organizaciones intergubernamentales regionales y mundiales, organizaciones no gubernamentales, asociaciones locales, académicos y otras personas competentes, y que, mediante seminarios regionales, garantice en especial la participación de personas que viven en la extrema pobreza.
La Subcomisión también adoptó una resolución sobre el derecho al desarrollo, y agradeció a la relatora especial Christie Ezim Mbonu por su informe de avance sobre la corrupción y el impacto de ésta en el goce de los derechos humanos, en particular los derechos económicos, sociales y culturales.
En su resolución sobre el derecho al desarrollo, la Subcomisión reconoció la importancia de su trabajo y señaló que éste integrarse a las actividades en curso en materia de desarrollo y derecho al desarrollo.
También destacó la importancia de enfocar el derecho al desarrollo desde la perspectiva de los derechos humanos, y señaló que el buen gobierno era fundamental para una aplicación exitosa del derecho al desarrollo. Además, también son importantes los compromisos financieros para respaldar el derecho al desarrollo, resaltó, y agregó que el tema requiere sensibilidad y apertura de todas las partes interesadas.
En su resolución sobre corrupción y su efecto sobre el goce de los derechos humanos, en particular los derechos económicos, sociales y culturales, la Subcomisión destacó los obstáculos y desafíos que enfrentan los estados que han adoptado mecanismos nacionales para prevenir y combatir la corrupción, y celebró los logros alcanzados por esos mecanismos.
La Subcomisión urgió a los estados que no lo han hecho a establecer mecanismos nacionales para prevenir y combatir la corrupción mediante la adopción e implementación de leyes específicas, y los exhortó a combatir enérgicamente y eliminar la corrupción.
En una resolución sobre el Segundo Decenio Internacional de los Pueblos Indígenas, la Subcomisión solicitó a la Alta Comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos que tome las medidas necesarias para asegurar la participación de su Oficina en las actividades del componente de derechos humanos del programa de acción correspondiente, en plena cooperación con el Coordinador del Segundo Decenio. (www.sunsonline.org nº5862)
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