No. 85 - Primera quincena de Mayo 1996

Cartagena

Hacia la Zona de Libre Comercio Hemisférica

Mientras ejecutivos de negocios y ministros de Comercio de 34 naciones americanas se reunían en Cartagena, Colombia, el 21 de marzo, se multiplicaban las maniobras diplomáticas hasta llegar a un enfrentamiento que acabó con la intervención de guardias armados.

Las discusiones eran sobre problemas candentes: desde los derechos de propiedad intelectual hasta las preocupaciones laborales y ambientales y que incluyeron desacuerdos básicos sobre cómo y qué tan rápido encaminarse hacia la meta acordada de establecer el Area Hemisférica de Libre Comercio para antes del año 2005.

Pronunciamiento empresarial

Las pirotecnias verbales más explosivas se dieron en el Foro Empresarial Hemisférico, reunión paralela de 1.500 representantes de empresas privadas de varios países del hemisferio, que tuvo lugar inmediatamente antes de la reunión oficial ministerial. Cuando una discusión sobre derechos de propiedad intelectual llegó a convertirse en altercado, en medio de las acusaciones argentinas contra el imperialismo estadounidense, se llamó a los guardias de seguridad para sofocar el disturbio.

El Foro Empresarial alcanzó un acuerdo para pedir nuevas medidas hacia una Zona de Libre Comercio Hemisférica (ZLCH), menor proteccionismo y estandarización y normas de calidad para las acciones del gobierno. El Foro Empresarial también recomendó que Estados Unidos adoptara el sistema métrico decimal y que revocara las restricciones Helms-Burton al comercio con Cuba, asegurando que lo último "podría hacer ineficaces los tratados de libre comercio y la expansión de la liberalización". Estados Unidos es el único país en el hemisferio que no utiliza el sistema métrico decimal, complicando los pasos hacia normas comunes.

Un acuerdo difícil

Por otra parte, discusiones acaloradas en la Reunión Ministerial de Comercio incluyeron un altercado entre el representante comercial estadounidense Mickey Kantor y el secretario de Comercio mexicano Herminio Blanco sobre la insistencia estadounidense de que un grupo de trabajo sobre compras públicas incluyera el análisis del impacto de la corrupción en el comercio internacional. Los ministros mantuvieron sesiones a puertas cerradas para preparar el lenguaje de la declaración final.

Por fin los ministros de Comercio acordaron establecer cuatro grupos de trabajo sobre adquisiciones gubernamentales, derechos de propiedad intelectual, el sector de servicios y libre competencia. Los términos de referencia (la descripción de las tareas asignadas) para los grupos de trabajo sobre adquisiciones gubernamentales y derechos de propiedad intelectual terminaron sustancialmente más débiles que el lenguaje propuesto por Estados Unidos. Otros siete grupos de trabajo originales, establecidos en la primera Reunión de Ministros de Comercio en Denver en 1995, se ocupan del acceso al mercado, las reglas de origen y procedimientos aduaneros, la inversión, las regulaciones técnicas y barreras comerciales, las normas sanitarias y fitosanitarias, los subsidios y medidas "anti-dumping" y las economías pequeñas. Un duodécimo grupo sobre resolución de disputas se formará en 1997. Los ministros rechazaron las propuestas para establecer grupos de estudio sobre temas laborales y ambientales.

En una acción de particular importancia para la agricultura, Chile y Colombia lograron ampliar el enfoque del grupo de trabajo sobre "anti-dumping" para examinar cómo los subsidios pueden tener efectos anti-competitivos indirectos en el comercio internacional. Estados Unidos acordó permitir que el grupo de trabajo identifique y haga recomendaciones sobre los apoyos agrícolas nacionales, además de los subsidios a las exportaciones.

La declaración final de los ministros de Comercio también aceptó la contribución del Foro Empresarial Hemisférico, específicamente reconociendo "la importancia del papel del sector privado y de su participación en el proceso hacia la ZLCH."

Aspectos laborales y ambientales

Los ministros del Trabajo del hemisferio, encabezados por Caro Figueroa de Argentina, pidieron que la FLCH "incorpore una dimensión social que garantice, a un mínimo, el respeto a las normas fundamentales del trabajo, incluyendo la organización y la negociación colectiva, la prohibición del trabajo infantil y forzado, y la no discriminación en el empleo" y defendieron el establecimiento de un diálogo entre gobierno, empresas y trabajadores para facilitar esta meta. Si bien el documento final expresó el agradecimiento por la declaración recibida de parte de la Décima Conferencia Interamericana de Ministros del Trabajo, sólo admitió que los ministros "reconocen la importancia de la mayor observancia y promoción de los derechos laborales y de la necesidad de considerar procesos apropiados en esta área a través de nuestros respectivos gobiernos". En un compromiso alcanzado después de intensas negociaciones, los viceministros de la ZLCH consideraron establecer un grupo de estudio para problemas ambientes solamente después de que reciban un informe del Comité para Comercio y Ambiente de la Organización Mundial de Comercio, en diciembre de 1996.

EEUU y Brasil: Enfrentamiento y acuerdos

Estados Unidos y Brasil representaron puntos de vista opuestos sobre la velocidad y la dirección de la ZLCH, tal como lo vienen haciendo desde el principio del proceso. En su calidad de país más grande del Sur y socio en la alianza comercial del Mercosur, Brasil ha defendido el encaminamiento hacia la ZLCH mediante alianzas entre bloques comerciales regionales, adquiriendo fortaleza en el Sur para confrontar al ALCAN y a Estados Unidos. Este, por su parte, parece favorecer una estrategia de incorporación gradual de naciones y de bloques al ALCAN. El funcionario de la Organización de Estados Americanos con responsabilidad especial por asuntos de la ZLCH, Miguel Rodríguez Mendoza, venezolano, defendió un tercer mecanismo que involucraría una ronda de negociaciones a nivel hemisférico similar a la Ronda Uruguay que culminó con la creación de la Organización Mundial de Comercio.

Brasil aboga por una concreción lenta del ZLCH, mientras que los representantes de Estados Unidos presionan por un avance más rápido hacia la integración comercial hemisférica, a pesar de la oposición política interna al libre comercio y a la incapacidad de la administración Clinton para obtener la autoridad de negociación por la vía rápida, necesaria para permitirle negociar el acceso de Chile al ALCAN.

La declaración final instruyó a los viceministros a "hacer una evaluación sobre cuándo y cómo iniciar las negociaciones de la ZLCH y a efectuar las recomendaciones sobre estos temas antes de la Reunión Ministerial de Comercio de 1997". La adopción de este lenguaje representó el rechazo de las propuestas estadounidenses que hubieran comprometido a los ministros de Comercio a "decidir en la próxima reunión ministerial cuándo y cómo iniciar las negociaciones globales de la ZLCH", y hubiera instruido a los viceministros a hacer recomendaciones específicas sobre "los 'caminos' más apropiados [para] facilitar la construcción de la ZLCH".

Los países más pequeños se quejaron de que Brasil y Estados Unidos se han adueñado del proceso de la ZLCH. Se elaboraron algunas concesiones sobre las diferencias Estados Unidos-Brasil durante una reunión bilateral en Brasil poco antes de la conferencia y durante las cinco horas y media del vuelo posterior a la reunión. Con el apoyo de Estados Unidos, la ciudad de Belo Horizonte, en Brasil, fue seleccionado como el sitio para la Reunión Ministerial de Comercio de 1997.

(Fuente: El Monitor de Comercio Interamericano)