Nº 155-156 Setiembre-Octubre 2004

Lucha contra la pobreza urbana

Una asignatura pendiente para la democracia.

En el Museo de la Ciudad de México tuvo lugar los días 19 y 20 de agosto un taller sobre lucha contra la pobreza urbana, un mal que se extiende en todos los países de América Latina y que exige medidas urgentes de combate. Además de las ponencias que dieron un marco teórico al problema, se expusieron y discutieron en cuatro mesas de trabajo experiencias exitosas de lucha contra la pobreza urbana, entre las que despertaron especial atención los presupuestos participativos y los programas de microcrédito.

A seis meses de realizado el Primer Taller de Combate a la Pobreza Urbana, en febrero en San Salvador, tuvo lugar el Segundo Taller Regional para Centroamérica, México y el Caribe sobre Lucha contra la Pobreza Urbana. Organizado por el Gobierno del Distrito Federal, las redes URB-AL 9 (“Presupuesto participativo”) y URB-AL 10 (“Lucha contra la pobreza urbana”) y la Fundación Friedrich Ebert, el encuentro contó con la participación de funcionarios de los gobiernos de las principales ciudades de la región, entre los que sobresalió la presencia de una numerosa delegación de las ciudades brasileñas de Sao Paulo y Porto Alegre, urbanistas, gestores sociales y académicos.
“La pobreza sigue siendo la asignatura pendiente” en América Latina, dijo en la inauguración del taller el Jefe de Gobierno del Distrito Federal, Andrés Manuel López Obrador, quien destacó que el combate a la pobreza siempre ha sido un tema fundamental, pero ahora incluso más porque en la mayor parte de los países de la región se ha logrado establecer la democracia. “Se ha avanzado en el terreno político-electoral, pero no se ha avanzado de la misma forma en el combate a la pobreza”, subrayó el gobernante de la mayor urbe latinoamericana.
En un enunciado poco frecuente por parte de un gobernante, más aún cuando aparece encabezando con amplio margen todas las encuestas para las elecciones presidenciales de 2006, López Obrador dijo: “Si no logramos mejorar las condiciones de vida, que cuando menos se detenga el empobrecimiento de la gente”. Y aludiendo al caso concreto del Distrito Federal, aseguró que allí, independiente del método que se aplica para lograr ese objetivo, existe la voluntad de dar atención prioritaria a la gente humilde. “Lo dijimos desde el inicio, el lema de la campaña fue ‘Por el bien de todos, primero los pobres”, y hemos estado actuando de manera consecuente”, afirmó el jefe de Gobierno del Distrito Federal. “Un gobierno se distingue por la forma en que orienta el presupuesto, no tanto por el discurso, y en el caso de la ciudad (de México) la mayor parte del presupuesto está destinado al desarrollo social, al desarrollo de la gente”.
En la inauguración del taller participaron también Fernando Rocafull, presidente de la Unión de Ciudades Capitales Iberoamericanas, Eberhard Fredrich, presidente de la Fundación Friedrich Ebert – México, Kjeld Jacobsen, coordinador general de la Red URB-AL 10 y secretario de Relaciones Internacionales de la Alcaldía de Sao Paulo, André Passos, responsable de la Red URB-AL 9 y secretario de Planificación de la Alcaldía de Porto Alegre, los secretarios de Gobierno, Alejandro Encinas, de Salud, Asa Cristina Laurell, y de Desarrollo Económico, Jenny Saltiel Cohen, del Distrito Federal, y el rector de la Universidad Autónoma Metropolitana, Víctor Sosa. La economista Rocío Mejía Flores, directora del Fondo de Desarrollo Social de la Ciudad de México, actuó como moderadora.
Respecto de las acciones puestas en marcha por el Gobierno del Distrito Federal en respuesta a la creciente pobreza que los últimos gobiernos federales han dejado con la aplicación de políticas económicas neoliberales, Asa Cristina Laurell destacó que lo principal es la creación de una política integral, redestributiva, del derecho social. Además, estas políticas son masivas y tienen como característica la tendencia hacia la universalización de los derechos y los beneficios para evitar que con el paso del tiempo se eliminen o se destinen a esquemas clientelares.
La segunda jornada del taller estuvo destinada a la presentación y discusión de experiencias concretas de lucha contra la pobreza urbana, actividad que se desarrolló en cuatro mesas de trabajo simultáneas. En la Mesa 1, Rocío Mejía Flores presentó el caso del microcrédito como herramienta de combate a la pobreza, una experiencia en la que lleva ya tres años y medio como directora del Fondo de Desarrollo Social. También presentaron casos concretos Graciela Andrade García, secretaria de Desarrollo social del Gobierno del Estado de Michoacán, Ricardo Pérez Trujillo, Gerente del Distrito de San Salvador, y Consuelo Corredor, directora del Departamento Administrativo de Bienestar Social de la Alcaldía de Bogotá.
La Mesa 2, dedicada al tema del presupuesto participativo como forma de combate a la pobreza urbana, contó con la participación de André Passos, de la Alcaldía de Porto Alegre, y los directores del Gobierno del Distrito Federal de México Eduardo Cervantes Díaz Lombardo, de Participación Ciudadana, y Daniel García Gómez, de Empleo. La Mesa 3 abordó el tema “Pobreza y exclusión social”, en tanto en la Mesa 4, sobre “Economía solidaria”, se expusieron experiencias de los agromercados como forma de combate a la pobreza en México.